sábado, 16 de octubre de 2010

El Ojo de Londres

El London Eye, es la tercera noria-mirador más alta del mundo. Tiene una altura de 135m y tarde de 20 a 30 min en una vuelta completa. Posee 32 cápsulas en las que puede almacenar aproximadamente 25 personas. Lo cual significa que en London Eye podría transportar 800 personas en cada vuelta.


Después de una mañana de clases más o menos normal, un almuerzo más o menos decente en Wasabi (Restaurant Express de comida japonesa) en la estación de Waterloo y de unas no tan aburridas 3 horas de clases de pronunciación; tuve un adorable y gélido paseo al Ojo de Londres.
Eran alrededor de las 4 de la tarde y, como siempre, Londres nos regaló su más adorable ambiente: nublado y gris. Tan siquiera no llovió…. porque claro, tienen que saber que puedes llevar el paraguas 365 días contigo, y el día que no lo llevas es el día en que llueve. Lo mismo con el autobús. Puedes estar mil días a tiempo en la parada de autobús y siempre está retrasado, pero el día en que tú vas tarde, el bus es muy puntual. Por lo tanto, lo pierdes y tienes que esperar el próximo.
Volviendo a lo del adorable paseo, el Ojo de Londres está muy cerca de la escuela, por lo tanto estuvimos en el lugar alrededor de las 4:15 p.m. Antes de proceder a subir, entras a una sala de cine, y ves un cortometraje en 3D sobre la ciudad y el London Eye. Lo curioso de los lentes 3D es que cuando miras a la persona que tienes al lado parece un extraterrestre. Casualmente la mitad del grupo eran personas latinas. Nos reímos e hicimos ruido, porque somos latinos.
Al salir de la sala, había un gran cubo donde tenías que poner los lentes. Yo solo me los quite y los lancé dentro. Luego pensé: “Si fueran Venezolanos, todos se llevarían los lentes”. Así que el sistema del cubo no funcionaría muy bien.

Finalmente entramos a la cabina, a pesar de toda la gente no tuvimos que esperar mucho, porque en cada cabina caben como 3000 personas. La vista es hermosa, puedes ver todo Londres y es un espectáculo para tomar fotos, las mejores vistas panorámicas de la ciudad las tendrás allí. Puedes ver el Big Ben, el agua piche del Thames, las Casas del Parlamento, etc. Y en aproximadamente solo 25 min. Tienes suficiente tiempo de ver todo. De hecho lo único que hicimos fue ir de un extremo a otro de la cabina y tomar fotos y fotos y tomarnos fotos y fotos.

Estar en la cima es fantástico. Personalmente pensé que iba a ser mucho más alto, pero es normal. Luego de estar en la cima y comenzar a descender, me comencé a impacientar. Pero no es como si hubiese podido hacer mucho al respecto, así que solo me senté a esperar.
Si luego de ver las fotografías piensas que subir con tu novio/a puede ser muy romántico estás muy equivocado, porque no creo que quieras estar abrazando y besuqueando a tu amado/a cuando estás compartiendo la cabina con 20 personas más. Que obviamente incluye niños ruidosos y gente anciana.


Pero luego de estar en el London Eye, descubrí como sería la boda de mis sueños. Un dato curioso es que de hecho, puedes casarte en el London Eye. Solo tienes que pagar y se realiza la ceremonia con el cura cuando estás en la cima, con las otras personas de las cabinas como espectadores. Totalmente romántico. Más romántico que ir a Las Vegas y que te case un tipo vestido de Elvis.

Canción del día: She's Got You Hight - Mumm-Ra

Viernes, 14/10/10

Jessi.

2 comentarios:

  1. Jajaja tremendo dato estas dando a cualquiera que quiera casarse contigo... Hey de verdad la vista es genial. I love it!

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